En un congelador: Alonso y Renault no se ponen de acuerdo
Cuando hacer unas semanas hablaba del futuro de Alonso en la Fórmula 1 el debate se armó. Que el español tiene que ir a Renault, que debe bajar sus exigencias, que su mejor lugar seria Red Bull. En fin, muchas situaciones paralelas que se dan alrededor de los próximos pasos del bicampeón del mundo.
¿Novedades? Pocas, pero importantes.
Renault, escudería que se muere por tener a Fernando en el equipo, ve cómo las conversaciones se enfrían y las distancias se estiran a tal punto que aún no hay definiciones. Los franceses le habían ofrecido un contrato por 2 o 3 temporadas al asturiano, pero Alonso prefiere sólo un año en Renault, para recaer en Ferrari. Se sabe de la admiración del piloto por la escudería italiana y al parecer tendría todo arreglado para firmar con ellos en el 2009, aunque no haya nada confirmado.
Después de las vacaciones de Alonso se volvió a reflotar su paso a Renault, pero aún falta la decisión de la FIA acerca del caso de espionaje que involucra a la escudería. La resolución estará lista el 6 de diciembre y hasta ese momento no se decidirá nada.
Por lo pronto las prácticas en Jerez no lo tendrán a Alonso en pista, ya que aún tiene contrato con McLaren. El otro equipo con chances de contratar a Alonso es Red Bull, pero se muestran reticentes a la llegada del español. Helmut Marko, ex piloto de F-1 y brazo derecho del mandamás de la compañía Dietrich Mateschitz, negó todo contacto con el piloto.
"Es mentira que Fernando Alonso haya acudido a nuestras instalaciones. Lo que sí puedo decir es que en Red Bull no hemos negociado nada con Alonso. Sabemos que él ha hablado con varios equipos y nosotros somos uno de ellos pero no ha habido negociación", aseguró Marko. El futuro no llegó aún, habrá que esperar sentado por las definiciones de esta novela, que de suspenso pasó a ser un drama y que de interesante se convirtió en estresante.
» Vía: Marca.com y f1aldia.com
LOS SIMPSONS: EL VIDEOJUEGO
La famosa familia sorprende con su nuevo juego.
Cada vez que nos encontramos ante un nuevo
juego basado en el mundo de los Simpson, nos asaltan las mismas preguntas: ¿Merecerá la pena? ¿Aprovechará el nombre de la
franquicia para esconder un título mediocre? Pero, sobretodo: ¿será ésta la entrega definitiva? Por primera vez, la mayoría se decantará por una respuesta afirmativa, ya que con más o menos defectos, nos encontramos ante el que presume de ser, literalmente, el
juego de los Simpson. Todo un homenaje a los más de 20 años de esta mítica
familia de la televisión, así como a toda una historia de videojuegos, llevado a cabo por EA.
Si bien con el paso de los años los videojuegos y los Simpson han ido cuidando cada vez más su relación (no olvidemos el querido y reciente “Hit & Run”), sus encuentros no han gozado de mucho cariño por parte de la crítica (exceptuando el ya clásico arcade o algunos
cartuchos de 8 y 16 bits). Pero la situación cambia con éste nuevo lanzamiento. La primera señal del cuidado que se ha tenido con el
juego es la fecha de lanzamiento. Si bien llega a tiempo para la poderosa temporada navideña, se ha procurado alejar lo más posible la película del
juego. Porque si los
juegos de los Simpson no suelen ser bien recibidos y las versiones de películas tampoco, unir ambas situaciones podría llevar a una catástrofe. Por lo tanto, la agradable sensación que deja el
juego es la de estar jugando a un producto hecho por y para jugones, no para aprovechar el estreno cinematográfico del film.
Jugabilidad El argumento, totalmente original, nos sitúa en Springfield con un edulcorado sueño de Homer que sirve para introducirnos en el
juego. Tras esto, empezaremos a desgranar los detalles de la historia, que llevará a toda la
familia Simpson a vivir su propio videojuego, siendo ellos totalmente conocedores de sus poderes, y parodiando a las grandes sagas que esta industria ha producido, desde las catacumbas de Tomb Raider hasta el mundo de
Zelda, pasando por clásicos como Pac-Man.
El primer personaje controlable será, como ya se ha dicho, el patriarca, Homer. Sus movimientos compartidos con su
familia son los clásicos de los
juegos de plataformas: saltar y ataque sencillo. Su especialidad es zamparse todo lo que encuentra para convertirse en una bola de grasa gigante que rueda. A medida que avanzamos, Homer aprenderá a flotar con helio y a convertirse en una especie de flubber verde y viscoso. Bart puede planear con la capa de su alter ego Bartman, así como disparar con su tirachinas; Lisa ataca sin piedad con la música de su saxo, que embelesa a los enemigos durante unos instantes; y Marge tiene el poder de convencer a los demás para que hagan el trabajo sucio. La pequeña Maggie queda relegada a moverse entre conductos de aire, al más puro estilo Metal Gear Solid.
La diferencia más notable de la versión de Wii respecto a todas las demás (exceptuando la de DS, única en el conjunto) es, algo ya habitual: el control. Si bien en la práctica es el mismo
juego, la manera de controlar a los personajes tampoco varía en exceso, pero permite algunos añadidos que con otras versiones no serían del todo posibles. El más evidente es el de los movimientos especiales. El ataque especial de cada personaje se lleva a cabo moviendo de un lado a otro el mando o el nunchuk, según el personaje. Por lo tanto, con Marge podremos llamar a las multitudes zarandeando el mando, y Homer soltará sus tóxicos eructos con el nunchuk. Los personajes se mueven de forma fluida, y una vez nos habituemos al control será bastante fácil desplazarse. Las batallas con enemigos (que estarán representados por diversos personajes de Springfield) varían de dificultad según el momento, ya que nos podemos encontrar con pocos oponentes en una zona amplia o con diversas hordas en un estrecho pasillo. Siempre hay un pequeño escondrijo del que salen, que podremos eliminar para parar el goteo de enemigos que no nos dejará descansar. A medida que el
juego avanza, se vuelve más complicado llevar a cabo las tareas del nivel sin eliminarlos antes, pero si se hace de forma organizada, podremos salir airosos de cada situación.
Otro detalle es el tema de la
salud y la vida. Si bien los personajes no tienen vidas (por lo tanto, el
juego nunca termina), sí que disponen de
salud. Como la gran mayoría de niveles están protagonizados por una
pareja de la
familia, en el momento en el que uno pierda toda la
salud, el siguiente llevará el relevo mientras espera que el otro se recupere (o puede “despertarle” tocándole con el botón A). El único momento en el cual puede aparecer lo más parecido a un Game Over es cuando ambos personajes son eliminados. En ese momento volveremos al punto de guardado anterior. Este detalle funciona bien, ya que de por sí no es un
juego corto y, por lo tanto, no necesita apoyarse en la repetición hasta la saciedad de niveles completos. Aún así, esto facilita mucho las cosas y acorta, inevitablemente, la vida del
juego, que podremos alargar para conseguir todos los objetos y clichés escondidos.
Si bien el control es agradable e intuitivo, el mayor problema reside en la cámara. Y es realmente frustrante encontrarse en situaciones difíciles sólo por la perspectiva. Pese a que puede controlarse a nuestro antojo, ni así se consigue evitar que caigamos al vacío, que no pulsemos el botón adecuado o que no acertemos en nuestro ataque al enemigo. En zonas estrechas, el control es imposible, y escenarios como Medal of Homer se convierten en verdaderos infiernos al no encontrar lo que buscamos por culpa de la cámara.
Dentro de los extras que cada personaje puede conseguir, como los vales de compra para Marge o las tarjetas de Stacy Malibú de Lisa, encontramos un gran añadido que seguro nos arrancará más de una sonrisa: los clichés de videojuegos. Si bien este apartado está muy desaprovechado, oír y leer críticas a las paredes invisibles, al doble salto o a las cajas de madera es reconfortante. Es evidente que 31 clichés son muy pocos, y probablemente nos encontremos con situaciones más tópicas y ridículas que no mencionan, girando este curioso detalle en su contra, ya que ¿porqué no dedican un cliché a las cámaras en 3D descontroladas?.
A modo de añadido para la versión de Wii, que contiene menos extras que las otras versiones, están los “Momentos Wii”, un par de
minijuegos que hacen uso, en su totalidad, de los controles inalámbricos de la consola. Mientras el primero, Bite Night, consiste en una lucha por ver quién come más grasas y menos verduras sacudiendo los mandos, el segundo, protagonizado por Bart, lanza en paracaídas al primogénito de los Simpson en plena zona de guerra, teniendo que cruzar los aros de humo dirigiéndole con el mando.
Gráficos Los gráficos son más que notables, siendo totalmente fieles al espíritu de la serie. Muestran escenarios 100% cellshading, unos personajes muy bien animados, y a veces no es fácil distinguir si estamos viendo una secuencia animada o una creada con el
motor del
juego. La variedad de escenarios es enorme, encontrándonos diversas localizaciones de Springfield: desde las calles donde vivimos nuestro propio GTA, pasando por el Museo de Historia Natural, donde el homenaje a Lara Croft es más que evidente, hasta sitios poco frecuentes, como el bosque que decide talar el señor Burns. Se echan en falta localizaciones míticas, o la sencilla opción de podernos mover por la ciudad a nuestro antojo, pero la recreación de cada uno de los 16 niveles deja el listón muy alto para posibles secuelas.
Mención aparte merecen los niveles que son homenajes directos a los videojuegos. El verde prado de Neverquest es toda una oda a los
juegos de rol parodiando, entre otros, a Final Fantasy y
Zelda, incluso llegando a imitar momentáneamente las 2 dimensiones. Pero el más comentado ha sido Grand Theft Scratchy. Pese a los extraños rumores que lo situaban fuera del
juego final, encontramos un nivel claramente dirigido a parodiar GTA (y, por defecto, a todas las variantes similares) que nos arrancará más de una sonrisa con sus ataques de violencia gratuita y la obsesión de Marge por arreglar edificios.
Música & Sonido La banda sonora cumple con su papel, siendo muy secundaria, como en la serie, pero entreteniendo, y en ningún momento llega a molestar. En función del nivel que estemos, y sobretodo en el caso que se homenajeen videojuegos, la música acompaña, siendo electrónica en algunos casos, más clásica en los
juegos de rol, o urbana en el caso de Grand Theft Scratchy.
El doblaje es de lo mejor del
juego. Todas las voces originales de la serie colaboran en el título, ayudando al jugador a meterse en la trama como si de un capítulo cualquiera de la serie se tratase. La variedad de frases de todos los personajes, incluyendo a los enemigos, es bastante notable, pero aún y así pueden llegar a cansar, sobretodo si el nivel es muy largo. De todas maneras, es todo un
lujo disponer de las voces en castellano en el
juego.
Conclusión La historia entre los Simpson y los videojuegos viene de muy atrás en el tiempo, pero quizás nos encontremos ante un producto que sirva para definir cuál debería ser la dirección a tomar en nuevos juegos de la familia de Springfield. No estamos ante un juego perfecto, tiene fallos y algunos de ellos bastante molestos, pero la immersión, tanto a nivel gráfico, como sonoro, jugable, e incluso emotivo, es tan grande que se le perdona todo. Se ha estado gestando mucho tiempo, y se nota el esfuerzo y esmero puesto en él.
No son pocos los fans de los Simpson que pedían a gritos el juego definitivo. Los habrá mejores, seguro, pero por fin la familia amarilla de cuatro dedos puede presumir de tener un juego a la altura de la serie: divertido, dinámico, variado, grande y, en conclusión: muy Simpson.
Fuente: ociojoven.com
Renault, escudería que se muere por tener a Fernando en el equipo, ve cómo las conversaciones se enfrían y las distancias se estiran a tal punto que aún no hay definiciones. 
2 comentarios
Modesto -
Y el juego... pues habra que probarlo! Los graficos están muy bien hechos, parece la serie! :D
Chaoooooooooooooooooooooo ^_^
elcuervo -
Pero buenoooooo
Me descargue una demo de Los Simpsons y la verdad es k estaba muy bien! y muy colorido todo, el doblaje tiene que estar chulo tb...Pero creo q tendria q tener mas libertad de accion como el Hit&Run, que lo tengo para la Xbox y me encanta!
Saludos